Por aquél entonces, tan sólo llegó a rodarse un breve piloto de cuatro minutos, que podéis ver en el vídeo que encabeza esta entrada. Los propios Joss Whedon y Jeph Loeb se encargaron del guión, mientras que, si escucháis con detalle, todos los actores originales de Buffy Cazavampiros (excepto Sarah Michelle Gellar, curiosamente la protagonista) prestaron su voz a su encarnación en dos dimensiones, habiéndose comprometido todos ellos a colaborar en la serie animada.
Entonces, ¿por qué fracasó esta idea? A priori, y viendo los populares nombres que estaban involucrados en el proyecto, puede parecer que el problema era de carácter financiero, y es que el presupuesto necesario era bastante elevado. Pero el motivo fundamental fue la falta de interés de las cadenas. Ninguna quiso arriesgarse con unos dibujos que eran demasiado adultos para los niños y a la vez demasiado flojos para el primetime.
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